La Casa 8 en Astrología: Explorando la Sexualidad y la Transformación
La octava Casa posee la valiosa reputación de ser la "Casa de la Transformación". En ella, se plantea el reto de impulsar un cambio profundo en la propia identidad. Es decir, ir más allá de las fronteras personales mediante la introspección y la transformación interior. Esta Casa es regida por Escorpio, Marte (según la antigua Astrología) y Plutón (de acuerdo a la moderna Astrología).
Ciclos Eternos Trascendencia y Renovación
La Casa 8 se relaciona directamente con Plutón y Escorpio, siendo considerada la "casa de la sexualidad, la transformación y el final". De acuerdo con la mitología, la diosa Perséfone es raptada por Plutón (conocido como Hades en la mitología griega), el dios del inframundo y de los difuntos, quien la lleva consigo al otro mundo. Al regresar al mundo de arriba, ella se ha convertido en una mujer, dejando atrás su inocencia de joven.
Este mito nos hace recordar que una conexión profunda con alguien puede cambiarnos por completo. Nuestra identidad y personalidad se transforman cuando nos sumergimos en la vida del otro. Nos moldeamos para coexistir. Incluso podemos dejar de ser la misma persona que éramos antes. Morimos como un "yo" individual para renacer como un "nosotros".
La Casa 8:- Está relacionada con Plutón y Escorpio.
- Se conoce como la "casa del sexo, la regeneración y la muerte".
- Hace referencia a su secuestro por parte de Plutón.
- Plutón la lleva al inframundo.
- Cuando regresa, ya no es la misma inocente adolescente que era antes.
- Nuestro "yo" y personalidad se moldean para adaptarse al otro.
- Dejamos atrás nuestra identidad anterior para renacer como un "nosotros".
- Experimentamos un cambio profundo y una verdadera transformación cuando nos entregamos por completo a una persona.
La octava casa y la potencia erótica
La Casa 8 simboliza nuestra identidad sexual. En los momentos íntimos, nos revelamos vulnerables, mostrando una parte de nosotros que solemos ocultar a los demás. Dejamos caer las máscaras. El acto sexual puede ser simplemente físico, brindándonos placer, o una conexión más profunda y auténtica con otra persona. Un ejemplo de esto es el tantra, una antigua práctica oriental que exalta el disfrute terrenal como medio para alcanzar la iluminación espiritual.
La Transformación a través de las Relaciones
Cuando interactuamos con otros, ofrecemos parte de quiénes somos y recibimos algo a cambio. Sin embargo, nuestras relaciones también reflejan nuestras experiencias pasadas.
Nuestra relación con nuestros padres, recuerdos de la infancia, entorno y dinámica familiar, dejan una profunda huella en nuestras vidas y condicionan los distintos roles que ocupamos (como hijos, padres, parejas).
Al nacer, somos frágiles y dependientes. No podemos valernos por nosotros mismos ni empezar a explorar el mundo solos apenas unas horas después del parto. Necesitamos amor, protección, comida y cuidado. Para la mayoría de nosotros, estos sentimientos se encuentran en la figura materna.
La pérdida del amor materno no solo significa perder a alguien cercano a nosotros, sino que puede ser percibida como abandono y muerte. Este miedo a perder el amor de alguien importante puede manifestarse luego en relaciones extremadamente dependientes o crisis intensas de celos. El temor a ser abandonados, a no ser amados, a quedarnos solos.
La Influencia Zodiacal Un Vistazo a las Residencias del Cosmos
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La influencia de los cuerpos celestes en la Casa
Con una fuerte conexión al enigmático signo de Escorpión, el elemento Acua y los planetas Marte y Plutón, se encuentra la Casa 8 dentro del mapa astral. Siguiendo el orden antihorario, esta casa se sitúa después de la Casa 7, formando parte de la segmentación de la carta natal en casas astrológicas.
La lección más relevante impartida por la Casa 8 es la de entender que toda crisis, sea interna o externa, tiene un propósito y puede ser superada. Esta comprensión nos abre las puertas para transformar dichas situaciones en oportunidades de sanación y renacimiento, ya sea a nivel físico, emocional, espiritual o mental.
Los planetas y cuerpos celestes que se alojan en la Casa 8, representan una energía disponible para trabajar a profundidad en temas sensibles y delicados como el sentido de la intimidad, los tabúes, la muerte y los misterios del mundo interior.
Las Posiciones de los Planetas en la Octava Casa
La influencia de los planetas y signos en la Casa 8 puede moldear nuestra manera de enfrentar las crisis y transformaciones radicales en la vida, así como nuestra habilidad de compartir recursos con otros.
Sol en la Casa 8: Refleja una fuerte necesidad de cambios profundos y trascendentales en nuestra vida. También indica una gran capacidad para compartir nuestros recursos y afrontar desafíos y situaciones difíciles con coraje y determinación.Luna en la Casa 8: Revela una sensibilidad y empatía notables hacia los demás, especialmente en momentos de crisis y transformación. Igualmente, señala una habilidad para conectar con nuestras emociones más profundas y regenerarnos emocionalmente.La Octava Residencia Compartiendo Activos
La Casa 8: Un lugar de transformación y compromiso
La Casa 8 representa un peso psicológico significativo ya que aborda las relaciones íntimas y las intensas transformaciones emocionales que resultan de ellas. Esta casa puede ser comparada con el caldero de una bruja o el horno de un alquimista, siendo el lugar donde se producen crisis y cambios en lo más profundo del ser.
Aquí es donde el compromiso adquirido en la séptima casa mundana se hace tangible, pasando por experiencias que nos llevan a formar parte de una entidad mayor y exigente: el "nosotros".
En otras palabras, los asuntos que aborda esta casa son de gran peso existencial, como la enfermedad, el peligro, el miedo a la muerte, la sexualidad, la reproducción, las deudas y la financiación. Por lo tanto, no son cuestiones que puedan tomarse a la ligera.
Octava Casa
La Casa 8 abarca distintos aspectos importantes. Se opone a la Casa 2, la cual está relacionada con la "propiedad y valores personales". Por esta razón, también se conoce como "la Casa de los bienes ajenos". Los signos y los planetas ubicados en la Casa 8 nos dan pistas sobre nuestro comportamiento financiero en el matrimonio, en el trabajo y en casos de herencias y testamentos.Por ejemplo, la presencia de Júpiter en esta Casa puede indicar un matrimonio económicamente próspero, la posibilidad de recibir una herencia o buenos resultados económicos en una sociedad comercial. En cambio, si Saturno se encuentra en una posición desfavorable, puede sugerir un matrimonio con dificultades financieras, deudas o asociaciones comerciales desastrosas a nivel económico.
La Casa 8 se encarga de la administración del dinero y los activos de otras personas a través de bancos, corredores de bolsa, analistas financieros y contadores. Sin embargo, esta Casa va más allá del dinero ajeno. También nos revela cómo estamos dispuestos a compartir nuestra riqueza y cómo nos relacionamos con los demás.
El Mundo Invisible de la Casa El Reino Celestial
La Casa 8 nos brinda una visión de la manera en que percibimos el mundo enigmático y secreto. Podemos ser más o menos sensitivos, creyentes o incrédulos en las fuerzas místicas de nuestra existencia. La muerte misma puede ser interpretada como el fin de todo o como una puerta de entrada hacia un plano superior.
Sin embargo, la pérdida no se limita solo a la muerte física. A lo largo de nuestra vida, encaramos diferentes tipos y momentos de pérdida. La Casa 8 nos habla de este tema. El término de una relación que ha condicionado nuestra identidad puede significar también la pérdida de una parte de nosotros mismos. Entonces surge la necesidad de renacer y forjar una nueva identidad.
Por otro lado, si nuestra carrera sufre un revés y nos vemos obligados a realizar algo con lo que no nos sentimos identificados, experimentaremos ese sentimiento de pérdida, de que algo ha llegado a su fin y no podemos recuperarlo. Una vez más, debemos reinventarnos y construir algo nuevo a partir de una realidad que ya no existe.
La casa
La Casa 8 es la casa de las situaciones emocionantes y reveladoras que nos llevan a cambiar y evolucionar. Es un lugar que representa el fin de aquello que ya no nos sirve, incluso en un nivel psicológico, para poder renacer a una nueva etapa.
En este sentido, su simbolismo también incluye las pérdidas materiales, los recursos compartidos con otros, como la pareja o los socios, así como los legados y herencias que recibimos de nuestros antepasados.
Otra faceta importante de la Casa 8 es el apoyo que podemos recibir de otras personas, ya sea en términos financieros, morales, espirituales o físicos. También puede estar relacionado con cirugías y enfermedades crónicas, en conjunto con la Casa 6.
